Hay conmoción en el barrio El Golfo, en el suroccidente de Barranquilla, por el crimen de Andrés Felipe Jiménez González, de 23 años.

El joven fue una de las dos víctimas mortales del ataque sicarial ocurrido en la noche del miércoles en la calle 121 con carrera 14.

Conocidos del joven manifestaron que "Andrés era un joven trabajador, serio y no se metía con nadie".

Nadie se explica qué pudo haber motivado que tres hombres llegaran a pie a la terraza de una vivienda, y uno de ellos disparó contra Andrés y Juan Camilo Vásquez Jiménez, de 24, la otra víctima.

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Según allegados, Andrés laboraba con su suegro en una carnicería y además tenía su propia venta de carnes con su pareja.

No saben si el hecho guarda relación con una extorsión al joven o si el atentado iba dirigido contra la otra víctima y Andrés cayó por estar en el lugar equivocado.

Las investigaciones por el doble crimen apenas comienzan.

Testigos señalaron que los jóvenes estaban en la terraza cuando llegaron a dispararles.

Andrés trató de refugiarse en el interior de la vivienda, pero el sicario le disparó y quedó muerto dentro de la misma.

Por su parte, Juan Camilo quedó tendido, sin vida, en vía pública.